Si en algún momento de tu vida te has obsesionado por tu peso corporal
hasta el punto de definir tu valor por el número que ves en la balanza, debes ser consciente de que no se trata solo de tu peso corporal. Existen otros factores que influyen en ese malestar.
Si te sientes cansad@ de ir tras un número perfecto que mide tus logros sin que nada te satisfaga; o no te encuentras atractiv@ al mirarte en el espejo, deberías cuestionarte si lo que en realidad necesitas es observarte desde otras perspectivas para sentirte realmente plen@.
Todo el mundo habla de las dietas keto, del reto 21 días, de la rutina de ejercicio más exitosa para reducir medidas, pero muy pocos hablan del verdadero peso del que tenemos que preocuparnos: Nuestros “KILITOS EMOCIONALES”.
¿Cuáles son tus KILITOS EMOCIONALES?
Pasamos gran parte de nuestra vida disfrazando nuestras emociones evitando prestar plena atención a todo aquello que se va quedando atrapado en nuestro cuerpo creando un peso asfixiante y que no desaparece ni con cardio ni con dietas mágicas.
Por eso el mejor depurativo para esas cargas que pesan más que cualquier número en la balanza es dedicarte tiempo para mirar dentro de ti y soltar los pesos que están ralentizando tu mente y tu cuerpo:
Y todos esos pesos que no nos dejan libres.
Fotografías tomadas de: @charlihoward